La convocatoria de esta semana la lidera Juan Carlos, quien nos pide escribir sobre el premio, en honor al aniversario que se cumple de la vez que recibió uno importante, En su casa encontraran más relatos
GALARDÓN Y BESO
Los bombones tenían un ligero y
lejano gusto a manteca rancia, habían pasado toda la noche fuera de la
heladera, no se dio cuenta de eso sino hasta el final, y el chocolate amargo no
era del agrado de los más chicos, pero las tortitas, como las llamaba su hijo,
con ese glaseado de limón y granas de colores estaban deliciosas, y las
galletitas también, y muy vistosas por cierto, con una cubierta de azúcar
celeste patrio que pretendía ofrecer caricia dulce a las ávidas lamidas, y
abrirse paso por las gargantas cerradas por la emoción liberada en el acto
escolar con motivo de la fecha conmemorativa.
A su hora, tuvieron una
participación lucida y un lugar destacado en la tira de mantel fértil que
parecía haber dado fruto a todo tipo de platos, uno al lado del otro de
delicias esmeradas que se disputaban la atención de padres, chicos y el apetito
del mediodía.
Los ojos gustosos, la sonrisa
abierta de su hijo frente a las tortitas que quedaron en casa, las más deformes
y más doradas de la camada, sus manos que las parten, las migas y granas que
caen camino a su boca rompen la languidez del estómago y de la tarde. Eso, y un
te quiero de yapa es el premio que se abrocha la noche